En cierre muy peleado, la Selección Mexicana Sub 18 de Hockey sobre Hielo derrotó a su similar de Israel 3-2 y dio con ello un paso importante para lograr la medalla de oro dentro del Campeonato Mundial, que se realiza en Monterrey, Nuevo León, al conservar así el invicto. Esta vez, el equipo mexicano salió a buscar la victoria desde el primer periodo, sin bajar el ritmo de juego y siendo constante a la hora de disparar a la meta contraria. Esto rindió frutos desde temprano porque los israelíes cedieron ante el ataque persistente de los mexicanos. Comenzaron a perder jugadores por castigos y al minuto 5:13, Diego Linares abrió el marcador para México. Desconcentrados, los israelíes seguían cayendo de fallas y castigos. México le sacó buen provecho a su dominio y al 8:48, Francisco Padilla puso el 2-0 en el marcador. México era dueño y señor de la pista y al 9:16, Christian Smithers marcó el 3-0, sólo había un equipo en la cancha y ese era México. Para el segundo periodo, Israel se aplicó en todos los sectores de la pista cerrándole todos los caminos al equipo mexicano. Esta medida fue exitosa hasta cierto punto porque ya no recibieron ninguna anotación y redujeron notoriamente la falta de jugadores en la cancha por castigos. El problema fue que tampoco los israelíes lograron anotar porque México tampoco se descuidó en ningún momento, sufrieron castigos por retrazar el juego, pero los jóvenes mexicanos nunca descuidaron la parte defensiva y eso llevó a que el segundo periodo de fuera con el mismo marcador de 3-0 a favor de los mexicanos. El tercer periodo fue una completa guerra de nervios. México volvió a sufrir al perder ritmo combativo del arranque de sus encuentros, algo que lo ha aquejado desde el inició del torneo. Los israelíes los sabían y presionaron en el momento adecuado para desesperar al equipo nacional y en el 47:34, Vitali Shvarzman anotó el 3-1 y parecía que olía a tragedia. En el 48:33 un severo error defensivo mexicano le puso en bandeja de plata la segunda anotación a Israel, a cargo de Kai Malachi. Era el momento de la verdad y los mexicanos entraron otra vez en ritmo, se batieron en zona defensiva y aunque no renunciaron al ataque, prefirieron no tener más problemas atrás. Los minutos pasaron y en un cierre tenso, México conservó su ventaja y terminó ganando 3-2. Ahora, dentro del camino por el título, México deberá enfrentar el próximo sábado a Nueva Zelanda en el cierre del certamen. Este resultado deja a México en la primera posición del torneo, aunque con un partido más que Nueva Zelanda, si los oceánicos ganan el viernes, el partido ante México del sábado será prácticamente una final. Mañana es jornada de descanso, el viernes se reanuda la acción con Israel-Irlanda a las 16:00 horas, y Sudáfrica-Nueva Zelanda a las 19:00. México no jugará este día. |
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